Brasil debutó en el Mundial, y Richarlison acabó con el fantasma del número nueve de los últimos años.

En el contenido a continuación, vea cuáles son las mayores promesas de la selección brasileña para esta competencia, además del delantero centro.

En un partido muy complicado contra Serbia, Brasil salió con la victoria y, además, con otro protagonista para ayudar en la conquista del Hexa.

En este artículo, hablaremos un poco sobre la “paloma”, como llaman al nuevo ídolo de Brasil.

El delantero, que se inspira en Ronaldo Fenômeno, llevó al delirio a la afición brasileña en el último partido.

Tras un partido muy tenso ante el serbio, el jugador acabó marcando dos goles y dando la victoria a Brasil.

Recordando que el segundo gol fue una obra de arte, un auténtico gol de casa. Una jugada para mostrarle al mundo entero que el arte del fútbol brasileño está más vivo que nunca.

Tras un bonito centro de Vinicius Junior, Richarlison dominó el balón en el aire, y convirtió en una volea perfecta, mandando el balón a las redes y enloqueciendo al estadio.

¡Pero esto ya es el apogeo del jugador! Vea el camino del atleta para convertirse en titular en la selección brasileña y cómo aumenta las posibilidades de Brasil de ser campeón.

El carismático jugador inició su carrera profesional en 2015, con el América MG, lo que pronto aseguró su traspaso a un equipo de élite del fútbol brasileño, el Fluminense.

Sin embargo, en su niñez, el jugador trabajaba limpiando vidrios, autos y vendiendo paletas heladas para ayudar a su familia.

Especialmente el comienzo fue muy difícil para Richarlison, tras el rechazo de varios clubes, como el Avai y el Figueirense, antes de tener una oportunidad en el Coelho.

El jugador viajó a Minas Gerais solo con boleto de ida para probar suerte en el América MG. Con su apuesta dando sus frutos, pronto llegó el reconocimiento.

Desde el inicio, el atleta se destacó, jugando 24 partidos con nueve goles, y en consecuencia fue pieza clave para el acceso del club a la Serie A del Campeonato Brasileño.

Al poco tiempo de sus buenas actuaciones, fue traspasado al Fluminense. En los primeros partidos se lesionó y estuvo buena parte del año sin jugar. Sin embargo, con la llegada del técnico Abel Ferreira, las cosas cambiaron de rumbo.

Con este entrenador del Fluminense, Richarlison vivió su mejor etapa en el fútbol brasileño, y aún agradece la ayuda del entrenador para desarrollar su carrera como atleta.

Sin embargo, su gran historia empezó cuando fue traspasado al Watford.

Todo sucedió muy rápido en la carrera del jugador, incluida su primera convocatoria a la selección brasileña.

Después de participar en las series A y B de Brasileirão, y de recibir un gran respeto en la liga más grande de Europa, la Premier League, ganó su primera invitación para jugar con la rayuela.

Richarlison fue convocado para jugar contra Estados Unidos y El Salvador, en partidos amistosos, y ese día se dio el primer paso hacia el sueño de jugar un Mundial.

El principal motivo de la titularidad del jugador, sin duda, fue su impecable actuación con la selección en los Juegos Olímpicos.

El atleta fue el principal destaque de la selección brasileña, anotando 5 goles y siendo el máximo goleador de la competencia en la conquista de la medalla olímpica.

Richarlison parece haber nacido para jugar a la rayuela. Ya van 11 goles en nueve partidos, desde que el jugador empezó a llevar el número 9. 

Además, el mediapunta sigue en una gran etapa en su actual club, el Tottenham.

El 7 de noviembre se dio a conocer la lista oficial de jugadores convocados para disputar el Mundial de Qatar 2022.

El sueño de Richarlison finalmente se ha hecho realidad, y el joven de Nova Venécia está en camino a la cima del fútbol mundial. Ahora, el deportista por fin es considerado uno de los mejores jugadores de su país.

Sin embargo, a un mes de la Copa, el jugador pasó por un gran drama. Mientras jugaba para la selección inglesa, se lesionó la pantorrilla, y tras enterarse que podría quedar fuera de la competencia, su piso se derrumbó.

En entrevista, el deportista dijo que el día que se hizo los exámenes para saber la gravedad de la lesión fue el más duro de su vida.

Pero llegó la buena noticia: Richarlison se había lesionado, pero con un tratamiento intensivo, era completamente posible volver a jugar al comienzo de la competencia.

Y hablando de intensidad, para volver rápidamente al terreno de juego, el jugador hacía tres sesiones de fisioterapia al día y, según su fisioterapeuta, el deportista quería despertarse de madrugada para complementar con una sesión extra.

En una entrevista, el jugador dijo “No me pierdo esta Copa por nada”.

En los últimos años, Brasil ha tenido algunos problemas para encontrar un delantero que funcione bien en ataque.

La camiseta número 9 de la selección brasileña no pesa más que la número 10 que lució Pelé, sin embargo, lleva una gran historia. Grandes jugadores como Careca, Tostão y el gigante Ronaldo Fenômeno lo lucieron.

En 2014 con Fred, y 2018 con Gabriel Jesús, nuestras dos últimas camisetas con el número 9 tuvieron pasajes poco destacables en la Copa del Mundo. En total, los dos jugadores estuvieron 8 partidos de Copa sin marcar.

Gabriel Jesus no ha marcado un gol en la Copa de Rusia, y Fred solo ha marcado uno en 2014.

Richarlison llegó para romper esa maldición y, en el primer partido, marcó dos goles y superó a sus competidores.

Todos saben que esta posición es extremadamente importante para nuestro equipo, que no ha tenido un finalista de primera durante años.

Es con esta gran arma que Brasil se prepara para enfrentar a Camerún en la siguiente ronda. 

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